ÍNDICE
1.Introducción
2.Origen del movimiento contra los mayas
3.Las mujeres en el genocidio guatemalteco
4.Bibliografía
GENOCIDIO GUATEMALTECO
1-INTRODUCCIÓN
Guatemala tiene
una historia larga de una dictadura militar y de la dominación de la élite
europeizada en el poder. El racismo contra los mayas y otros grupos indígenas,
como también las divisiones de clase social provocaron una guerra civil de 36
años que con el tiempo se convirtió en un genocidio absoluto contra los mayas.
Así, la población maya sufrió masacres, torturas, vio cómo se destruían sus
casas y sus pueblos, y fueron forzados en muchas ocasiones a desplazarse a
otras comunidades o a las montañas para salvar su vida. Así como también el trauma
psicológico y espiritual a los pocos sobrevivientes.
La campaña
genocida de Ríos Montt contra la población indígena maya, fue respaldada por
EE.UU.
El conflicto armado interno en Guatemala, que
se extendió entre los años 1962 y 1996, se saldó con un total de 200.000
personas muertas y desaparecidas. El peor periodo de violencia fue entre
1982-1983, periodo conocido como “El Holocausto silencioso”.
2-ORIGEN DEL
MOVIMIENTO CONTRA LOS MAYAS.
Nos situamos en
1954, donde el presidente Jacobo Guzmán, acusado de comunista, es derrocado por
un grupo de extrema derecha pro fascista, y apoyado por Washington, y que
contaba entre sus promotores con el mayor asesino que ha dado América, el
general Efraín Ríos Montt.
En 1982, un nuevo golpe de estado le lleva a
la presidencia de la República de Guatemala, detentando todos los poderes,
suprimiendo la constitución y declarando un autentico estado militar de extrema
derecha, de forma que los indígenas pagaran caro el no haberle apoyado nunca.
Rápidamente, su gobierno militar instaura un programa nacionalista con el
propósito de “integrar” a la población indígena campesina, según ellos “ignorantes
y por ello vulnerables al comunismo internacional”, pasando a combatir con
dureza a las fuerzas marxistas: Fuerzas Armadas Rebeldes, Ejercito Guerrillero
de los Pobres y el Partido Guatemalteco del Trabajo.
A su vez, a la mayoría de indígenas, que
constituían la base de estas fuerzas se les sometió a una matanza y persecución
bestial, pues según palabras de Ríos Montt “los indígenas son la base de
estos movimientos y por lo tanto, al ser sospechosos hay que matarlos a todos”.
A partir de este
momento y desde 1983-1985 se inicia una campaña literal de eliminación física
de indígenas, muchos de ellos son ejecutados extrajudicialmente, pueblos
enteros (hasta 448) son literalmente arrasados por el ejército y por las
“patrullas de autodefensa civil” de extrema derecha.
Se lleva a cabo
una política genocida, y fuertemente racista, y los mayas son literalmente
borrados del mapa, siguiendo los consejos del general Ríos Montt y su escuadrón
fascista, todo ello, con el beneplácito de Estados Unidos.
El
comité de derechos humanos llega incluso a detallar 69 masacres, con atentados
del ejercito hacia cualquier indígena que se atreviera a apoyar la guerrilla
marxista. Así, su brutalidad asesina se evidencia en las cifras, donde, en un
gobierno de tan solo 17 meses, de 1982-1983, logra asesinar a 100.000
indígenas, dejando 500.000 refugiados, y borrando pueblos enteros del mapa.
Su
gobierno terrorista es suprimido en un
golpe de estado que le aparta del poder, finalizando en 1985 las políticas
genocidas que habían llevado a Guatemala a la página más oscura y trágica de la
historia reciente de América.
3-LAS MUJERES EN EL
GENOCIDIO GUATEMALTECO
La
violencia afectó de manera particularizada a las mujeres y niñas mayas ixiles.
Entre las formas de violencia específica que sufrieron destacan las violaciones
masivas por soldados, la desnudez forzada, la esclavitud sexual y la violencia
contra mujeres embarazadas que no solo eran violadas sino que frecuentemente
les sacaban los fetos rajándoles el vientre.
Fueron torturas
cometidas sistemáticamente por el Ejército y por los paramilitares contra estas
mujeres. Mientras se lo hacían, les decían, por ser indígenas, “no son
gente, son animales”. Muchas de estas mujeres nunca contaron estos crímenes
y las que lo hicieron, o se supo en su comunidad, fueron rechazadas,
despreciadas o expulsadas.
Un hecho habitual fue dejar evidencia pública
de la violencia sexual que se ejecutaba contra las mujeres y niñas, ya que sus
cuerpos quedaban expuestos públicamente, en muchas ocasiones desnudos y con
mutilaciones de todo tipo, incluso con objetos introducidos en la vagina o
estacas clavadas en sus vientres.
Varios testimonios de mujeres
cuentan que sufrieron violaciones colectivas, hasta cuarenta soldados haciendo
cola para violarlas.
Muchas de ellas
nunca pudieron aguantar que ningún hombre se volviera a acercar a ellas. Las
destrozaron físicamente, pero también como personas. “Las sacaban de sus casas
y las llevaban a lugares sagrados y allí las violaban, les hacían pasear
desnudas. A otras se las llevaban a los destacamentos como esclavas sexuales y
para que limpiaran, cocinaran…”.
El Tribunal
confirma en su sentencia que las mujeres ixiles sufrieron actos de violencia
sexual, tomando como prueba los testimonios de las mujeres y el peritaje sobre
crímenes internacionales de género. En concreto, afirma que estos actos fueron
sistemáticos y buscaban “la ruptura del tejido social” de las comunidades mayas
y “la eliminación de la semilla ixil” por lo que son prueba objetiva de la
intención de destruir al grupo y, por tanto, constituyen genocidio.
Además, la
sentencia considera que la violencia sexual ejercida contra las mujeres en el
seno del conflicto armado interno, infringió las normas de Derecho
Internacional Humanitario que protege a la población civil no combatiente.
Ríos
Montt no ha sido juzgado ni condenado por sus actos, después de haber cometido
un genocidio bestial, y puede
presentarse de nuevo a elecciones en su país.
Finalmente, les
dejo un vídeo donde podrán escuchar los testimonios de algunas mujeres que han
vivido en aquellos años infernales.
4-BIBLIOGRAFÍA
CICATRICES DE LA HUMANIDAD
ResponderEliminarEspinelas.
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Conmemorando
27 de enero
Día INTERNACIONAL DEL
Holocausto.
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El Quetzal botó el plumaje
signo en luto permanente
masacre que aún se siente
la matanza no es lenguaje.
El criminal personaje
con aberrante segrego
no alcanza vivir, reniego
masacre no cicatriza
humarada paraliza
cual “sacrificio por fuego”
.
Un niño suplica al cielo,
la madre grita en lamento
al ver el fusilamiento
desde un feto hasta el abuelo.
Del racismo me congelo
esa extinción repetida
mente criminal vendida
fue la causa de exterminio
de mujer, anciano, ninio,
de ejercito fratricida.
.
Quiero no sea recuerdo
y NUNCA MAS se repita
aun hoy la humanidad grita
hay entes, peor que un cerdo.
No puedo narrar, me pierdo
cada campo es una cripta
allí su alma fue proscripta
donde se husmea el silencio
por funeral, es conciencio
El campesino la encripta
.
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Dr. Rafael Mérida Cruz-Lascano
Guatemala, C. A.
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Segrego: Marginar a personas por motivos políticos.
sacrificio por fuego: Holocausto.
Exterminio: Crimen de vida.
Ninio: Niño.
Fraticida: Matar. Todos los humanos somos hermanos.
Cripta: Tumbas, Zanjas, cueva, fosas.
Proscripta: Expulsada de su ambiente
Conciencio: Se obligo, al campesino al conocimiento de su situación después de su terrible aniquilación.
Encdripta: Frase, escrito.-
Figuras retoricas:
Aliteración: Masacre, matanza, sacrificio, fusilamiento, extinción, exterminio.
Anáfora, en primera estrofa,. Masacre
Anticlimax: Desde un feto hasta el abuelo.
Paralipsis: Quiero, no sea recuerdo.
Prosopopeya: El quetzal boto su plumaje. (Guatemala está en calamidad)
Anagrama: Ninio, de forma Sirve que resulte Niño. -Elipsis o Zeugma-.
Sinécdoque: Hay entes, peor que un cerdo. (personajes muy sucios)