Translate

domingo, 8 de marzo de 2015

Trabajo colectivo: Belzec (Compañera: Zelia Lacruz Ros)

ÍNDICE

1. Belzec

2. Operación Reinhard

3. Biografía

4. Historia del campo

5.Final de Belzec

6.Vídeos

7. Fuentes


1. BELZEC

Belzec fue el primer campo nazi que tuvo cámaras de gas permanentes y fue el campo que se
utilizó como modelo para la operación Reinhard. Le dieron ese nombre porque era el nombre
clave de uno de los tres cambios de exterminio que se crearon para aniquilar a los judíos de
Polonia.

Belzec, como muchos otros campos, tenía una pequeña orquesta compuesta por seis miembros,
los cuales tocaban el violín, el acordeón y la flauta. Normalmente tocaban entre las cámaras de
gas y las fosas comunes y tocaban durante los exterminios y para el entretenimiento de los
soldados durante los encuentros de alcohol y libertinaje, que normalmente era los domingos.


                                             Aquí podemos ver una imagen de Belzec

Y ahora una imagen de la orquesta del campo



2. OPERACIÓN REINHARD

Durante la Segunda Guerra Mundial, en los países europeos que se encontraban bajo ocupación alemana, los centros de exterminio eran instalaciones establecidas exclusiva o principalmente para el asesinato en masa de seres humanos, al estilo de las líneas de montaje. Los pocos prisioneros que fueron seleccionados para sobrevivir, temporalmente, fueron usados de alguna forma para ayudar en esta función principal. A los centros de exterminio a veces se los denomina “campos de exterminio” o “campos de concentración”.

Operación Reinhard (Einsatz Reinhard) se convirtió en el nombre en código del plan alemán de asesinar a aproximadamente dos millones de judíos en el llamado Generalgouvernement (Gobierno General). El Generalgouvernement era la parte de Polonia bajo ocupación alemana que no estaba directamente anexada a Alemania, ni a Prusia oriental alemana, ni había sido incorporada a la Unión Soviética bajo ocupación alemana. Para implementar la “Operación Reinhard”, las SS y la policía construyeron tres centros de exterminio: Belzec, Sobibor y Treblinka II. Los centros de exterminio de la Operación Reinhard estaban a cargo de oficiales de la SS y la policía que pertenecían al personal líder de la SS y la policía en Lublin. Los auxiliares de policía entrenados en un campo especial del distrito de Lublin, el capo de entrenamiento Trawniki, los protegían y facilitaban las operaciones de exterminio.

Entre las víctimas de los centros de exterminio de la Operación Reinhard hubo judíos polacos, alemanes, austríacos, holandeses, franceses, checos y eslovacos, así como también gitanos, prisioneros de guerra soviéticos, y polacos. Las SS y la policía asesinaron a la mayoría de los prisioneros deportados a los centros de exterminio de la Operación Reinhard encerrándolos en cámaras de gas fjas dentro de las cuales bombeaban monóxido de carbono (gas letal) mediante motores de camiones. Una minoría de prisioneros fueron fusilados.















La operación Rwinhard se diseñó como un método más “humano” de llevar acabo el asesinato en masa, pero sólo desde el punto de vista de los asesinos encargados de matar a sus víctimas. Las ejecuciones en masa con rifles o ametralladoras tenían un efecto negativo en la estabilidad y en la conciencia de los pelotones de ejecución de la SS. En la Operación Reinhard se utilizaban gas para matar gente y abstarer a sus verdugos del acto de matar. Fue el inicio de una forma de asesinato en masa industrializado sin precedentes en la Historia de la Humanidad.



La Operación Reinhard duró hasta finales de 1942. Luego las operaciones de exterminio continuaron en el resto de los campos de concentración al ritmo burocrático que permitiía la Seguna Guerra Mundial. Se estimaba que la Operación Reinhard asesinó la cantidad de 1.700.000 de judíios y gitanos.

3. BIOGRAFÍA

 Reinhard Tristan Eugen Heydrich nació el 7 de marzo de 1904 en Halle del Saale, fue el segundo en el mando de las SS, organización del régimen nazi liderada por Heinrich Himmler. En 1936, dirigió la Oficina Central de Seguridad del Reich. Fue Protector de Bohemia y Moravia desde el 29 de septiembre de 1941 hasta su muerte, el 4 de junio de 1942, ocasionada por la resistencia checa. Convocó y presidió conferencia Wannsee del 20 de enero de 1942 donde se planeó el exterminio de los judíos de Europa (Holocausto). Sus propios hombres de las SS lo llamaban la “bestia rubia”.


 Heydrich es, por su personalidad y sus acciones, una de las figuras más oscuras del régimen nazi, haciendo palidecer incluso a las características de su superior Himmler. Heydrich desmostró ser un hombre extremadamente inteligente, de una astucia aguda para urdir complicadas conjuras minuciosamente estructuradas con efectos de largo alcance. Era, según Walter Schellenberg, un “animal de presa”. Además, demostró ser un acertado administrador y gobernante al estar a cargo de la administración checa.

Era muy calculador y desconfiado, de claridad en sus pensamientos y exposiciones, además de eficiente y carente de escrúpulos. Nada parecía escapársele de las manos. Para muchos era el “nazi perfecto”. Hitler consideraba a Heydrich un hombre extremadamente dotado y peligroso, y lo llamaba “el hombre del corazón de hierro”. Incluso Amon Göth lo admiraba.

Su sola presencia marcaba un abismo psicológico que ocasionaba terror físico incluso a sus más cercanos colaboradores. Era muy temido en su círculo personal. Para Wilhelm Canaris, Heydrich era su pesadilla, que lo sumía en trances nerviosos. Bormann lo mantenía a distancia y jamás intentó acción alguna contra Heydrich. Incluso su propio superior Himmler llegó a temerle.


4. HISTORIA DEL CAMPO

En noviembre de 1941 se empezó a construir en Polonia el primer campo de concentración y el 16 de marzo del año siguiente se terminó y este, acabó dividido  en dos partes que eran las siguientes:
  • Primera parte: estaban los andenes de llegada de los prisioneros. Tenía una capacidad máxima de 15 vagones de longitud y los que se hicieron más tarde, llegaron a tener una capacidad máxima de trenes con hasta 60 vagones.
  • Segunda parte: esta parte estaba conectada con la primera por medio de un pasillo que había bajo tierra que era de unos 100 metros de longitud. En esta parte se encontraban las cámaras de gas y las fosas comunes que median unos veinte metros de longitud, seis de ancho y tres de profundidad. Además se construyeron nuevas instalaciones donde querían guardar los sonderkommandos (comandos especiales), que eran unidades de trabajo que durante la Alemania nazi estaban formados por prisioneros judíos y no judíos que los ponían a trabajar en las cámaras de gas y en los crematorios. Esta parte quedaba mayormente por lonas de camuflaje con la finalidad de evitar de que los localizaran y los fotografiaran los reconocimientos aéreos.
La siguiente imagen nos enseña las diferentes partes del campo:

El comandante Odilo Globocnik, jefe de los subcampos disemimados por la zona de Belzec y previso a su construcción, durante el mes de Octubre de 1941 asesinó a unos 450 prisioneros por camión hasta Lublín(Polonia). Una vez que estaban todos los prisioneros sobre la zona de Belzec, cerca de una base áerea de Lublín, obligaron a los prisioneros a cavar una fosa común en la que se les obligó a meterse dentro de diez en diez y a desnudarse y luego ponerse una camisola, después, les obligaron a esparcir paja sobre ella y a que se fueran tumbando boca abajo en ella y alternándose las posiciones. Una vez ya colocados les tiraron granadas y cuando estas explotaban, les disparaban contra los que aún se movían.

Después, los compañeros que estaban viendo (obligados) estas mantanzas, tenían que esparcir cal sobre los cadáveres para colocarse ellos encima y repetir lo mismo, y así sucesivamente hasta llenar la fosa con unos treinta o cuarenta prisioneros. Mientras tanto, otros soldados se entretenían torturando a otros prisioneros, por ejemplo, a las mujeres las torturaban dándoles golpes de culata (golpes con la parte trasera del arma) y viendo como les golpeaban la cabeza contra el suelo a sus propios hijos.

Más tarde, se le pasó el mando del nuevo campo a Christian Wirth que era conocido por llevar acabo el programa T4 de eutanasia. Por los conocimientos que fue asquiriendo durante los programas de eutanasia, le ordenaron que creara tres cámaras de gas que comenzaron a funcionas el 17 de marzo de 1942 con monóxido de carbono que venía de los gases de escape que salían de los motores de diesel que fueron diseñados para eso. En agosto de ese mismo año, Wirth fue sustituido por Gottilieb Hering que este, se quedará en el puesto hassta la evacuación del campo en diciembre de ese mismo año.

Lo que hacían para engañar a las víctimas era que al bajar del tren los separaban por grupos y les decían que iban a poder ducharse y desinfectarse antes de asignarles un trabajo específico en el campo.

Después, cuando iban a matarlos por grupos, separaron a los hombres de las mujeres, niños y ancianos que luego eran conducidos por un túnel hasta las cámaras de gas, las cuales estaban controladas por Lorenz Hackenholt.

En mayo de 1942 se construyeron otras seis cámaras de gas, lo que permitió poder matar a 1200 prisioneros a la vez y además provocó que utilizasen a unos 1000 prisioneros como sonderkommandos en trabajos como la clasificación de maletas, artesanos, obreros y prisioneros destinados a las cámaras de gas y a las fosas comunes, que aún así, estos prisioneros también serían asesinados durante la evacuación.

Luego, tras la evacuación del campo durante el mes de diciembre de ese año, eliminaron las pruebas físicas, y, más tarde, a principios de 1943, se abrieron las fosas comunes y se incineraron los cadáveres, lo que hizo que se diera por inexistente este campo.



Como conclusiones pudieron decir que hubo unas 600.000 víctimas mayormente judíos, pero también gitanos.
                          
   Esta es una foto de las fosas que tenían que hacer los prisioneros



                                   Este es el papel por el cual nombraron a Odilo Globonik


Este es Odilo Globonik


5. FINAL DE BELZEC

Después de obligar a los presos judíos a desenterrar los cuerpos de las fosas comunes y quemarlos en piras, las SS destruyeron el campo, en abril de 1943, arrasándolo hasta los cimientos y convirtiéndolo en una plantación. El resto de los presos que quedaban vivos fueron asesinados.

Los alemanes dividieron Belzec en una zona combinada de administración-recepción y un área separada en la que las SS y la policía podían llevar a cabo el exterminio masivo oculto de la vista de las víctimas que espeaban en la zona de recepción. Un largo camino, denominado “el tubo” conectaba las dos secciones del centro de exterminio. La zona de recepción tenía el ramal de ferrocarril y una rampa de selección. El área en la que se llevaba a cabo el asesinato masivo incluía las cámaras de gas y las fosas comunes. Los árboles plantados a lo largo del perímetro y las ramas entrelazadas con la alambra servían como camuflaje y evitaba que personas de fuera pudiesen ver las operaciones dentro del campo.

Los judíos que llegaban en los transportes eran desembarcados en una plataforma del área de recepción. Las SS anunciaban a los deportados que acababan dellegar a un campo de tránsito y que debían dejar cualquier objeto de valor. Inicialmente, los hombres eran separados de las mujeres y los niños, aunque con el paso de los meses, cuando los transportes se convirtienron en masas caóticas, debido sobre todo al conocimiento que las víctimas tenían de lo que iba a suceder, no siempre se pudo aplicar esta separación. Posteriormente, los judíios eran obligados a desnudarse y correr a través del “tubo”, que llevaba directamente a la cámara de gas, camuflada como duchas.

Los miembros del Sonderkommando, grupo de presos seleccionados para diversos trabajos, estaban empleados en la zona de asesnato: extraían los cuerpos de la cámara de gas y enterraban a las víctimas en fosas comunes. Otros presos, seleccionados temporalmente, trabajaban en la zona de administración-recepción. Estos destacamentos de trabajo eran asesinados periódicamente, para ser reemplazados por personas llegadas en transportes recientes.


6. VÍDEOS 

Se muestran fotos antiguas de Belzec:


Aquí se explica el campo en dos partes:

- Parte 1:

-Parte 2:

7.FUENTES














sábado, 7 de marzo de 2015

Trabajo individual: La guerra de trincheras y las trincheras.

ÍNDICE

1. La guerra de trincheras

2.Las trincheras

3.Condiciones de vida
  3.1 El barro
  3.2 El frío
    3.2.1 "El pie de trinchera"
  3.3 Ratas y piojos
  3.4 El sufrimiento mental

4. Armas utilizadas

5.Las mujeres en las trincheras

6.Relato de los soldados y vídeo

7.Fuentes

1. LA GUERRA DE TRINCHERAS

La guerra de trincheras es una forma de hacer la guerra, en la cual los ejércitos combatientes mantienen líneas estáticas de fortificaciones cavadas en el suelo y denominadas trincheras. La guerra de trincheras surgió a partir de una revolución en las armas de fuego. Hubo períodos de guerra de trincheras en la guerra de Secesión (1861-1865) y en la guerra ruso-japonesa de 1904-1905, pero llegó a su punto máximo de brutalidad y mortalidad en el Frente Occidental de la Primera Guerra Mundial. Estos huecos eran cavados a 1 o 2 metros de profundidad y se conectaban con otros para mayor movilidad de los bloques de combate.

2. LAS TRINCHERAS

Una trinchera es un agujero excavado en la tierra, que sirve para proteger el avance de las tropas. Detrás de las trincheras de primera línea, se encontraban las trincheras cubiertas, que servían para proteger en caso de que el enemigo atacara la primera. También existían trincheras de apoyo, que contaban con refugios subterráneos, donde descansaban los soldados que no estaban luchando.

Los suministros, alimentos y tropas de reemplazo eran llevados a través de una red de trincheras de reserva y comunicaciones. La zona que se hallaba entre las trincheras de ambos bandos recibía el nombre de “tierra de nadie”, un territorio muy peligroso, ya que solía estar cubierto de alambradas y se podía pasar a ser un blanco fácil para el enemigo.


Las trincheras nunca eran rectas, sino que se cavaban en un esquema dentado, que convertía la línea en segmentos conectados por traviesas. Esto implica que un soldado nunca podía ver más de 10 metros aproximadamente a lo largo de la trinchera. Con ello el enemigo no podría enfilar la trinchera completa si lograba ganar acceso a algún punto y, si caía una bomba en alguna trinchera la metralla o shrapnel no podría llegar muy lejos.

El lado de la trinchera que miraba al enemigo se denominaba el parapeto, y tenía un escalón de fuego. El lado trasero de la trinchera se denominaba el parados, que protegía la espalda del soldado de la fragmentación de las bombas que caían detrás de la trinchera. Si el enemigo conquistaba la trinchera, entonces los parados se convertían en su parapeto. Los laterales de la trinchera se recubrían con sacos de arena, astillas y trozos de madera y alambre. El suelo normalmente se recubría con planchas de madera.

Para permitir a un soldado ver fuera de la trinchera sin exponer su cabeza, se creaba un agujero en el parapeto. Podía ser simplemente un hueco entre las bolsas de arena o podía estar protegido por una plancha de acero. La otra forma de observar desde una trinchera era mediante un periscopio. Su formas más sencilla era un tubo hueco con dos ángulos de espejos en las partes superior e inferior.
                                                                 


3. CONDICIONES DE VIDA

Cuando comenzó la Primera Guerra Mundial, en agosto de 1914, los soldados creyeron que terminaría rápido. Muchos pensaron que estarían de regreso en casa para Navidad. Sin embargo, la guerra duró cuatro años y hubo muy poco movimiento en las trincheras, donde las enfermedades y la desnutrición estaban fuera de control.

Se suponía que debía ser la guerra que pusiera fin a todas las guerras, pero en realidad fue la primera guerra moderna que implementaría enormemente la carnicería en los campos de batalla.

La guerra de trincheras fue muy dura para los soldados de ambos bandos. La falta de alimentos, el frío, el barro, la plaga de ratas y piojos, entre muchos otros factores, hicieron de sus vidas miserables.

 La guerra se alargada cada vez más y parecía interminable. Los soldados debieron seguir soportando las duras condiciones en que vivían.

3.1 El barro

El mal tiempo fue la maldición de las trincheras. Una simple lluvia podía transformar todo en un mar de lodo. La situación de los soldados empeoraba, se dificultaba el movimiento y las trincheras se llenaban de barro.



3.2 El frío

Después del barro, la segunda maldición fue el frío. El invierno fue extremadamente duro, con temperaturas cerca de los -20 grados. Era casi imposible moverse en las trincheras. No se podía hacer fuego y los que vigilaban de noche sufrían un verdadero martirio. Como resultado de estar expuestos largos períodos en la humedad y el frío, los hombres adquirieron el llamado “pie de trinchera”, azules y sin vida, propensos a sufrir gangrena.





3.2.1 "El pie de trincheras"

El “pie de trinchera” es una condición médica causada por la exposición prolongada de los pies a la humedad, falta de higiene y las condiciones del frío. Los pies afectados pueden presentar entumecimiento, afectada por eritrosis o cianosis como resultado de suministro vascular pobres, y los pies pueden comenzar a tener olor a descomposición. A medida que la condición empeora la necrosis, los pies pueden comenzar a hincharse. El “pie de trincheras” avanzado a menudo implica ampollas y llagas abiertas, que conducen a las infecciones por hongos, lo que a veces se llama úlcera tropical. Si no se trata, el “pie de trinchera” por lo general resulta en la gangrena, que puede causar la necesidad de la amputación. Si se trata correctamente, la recuperación completa es normal, a pesar de que está marcada por el dolor severo a corto plazo cuando se recupere la sensibilidad.



3.3 Ratas y piojos

Una multitud de ratas circulaba por las trincheras, atacando las escasas provisiones que tenían, además de los cadáveres de los soldados ya muertos en la guerra. No podían dormir, ya que incluso se atrevían a meterse bajo sus gorras si escondían allí comida.
La higiene en las trincheras dejaba mucho que desear y todos tenían piojos. Eran cientos, en cualquier parte del cuerpo y pasaron a ser una excelente cura para el aburrimiento.



3.4 El sufrimiento mental

La vida en las trincheras fue debilitante en muchos aspectos, no solo físico, sino también en lo mental. Era aburrida y se tenía miedo a la muerte. Cada día moría gente, los soldados estaban a menudo cara a cara con la muerte. A veces los cadáveres se descomponían frente a las trincheras. La falta de sueño y la impotencia desmoralizaban las tropas. Los soldados se sentían miserables, deprimidos, agotados y sin ánimos para vivir. Muchos cayeron en desordenes mentales, especialmente durante los últimos años de guerra.



4. ARMAS UTILIZADAS

Las ametralladoras son posiblemente las armas más características de la guerra de trincheras, con la imagen de oleadas de infantería siendo abatidas por ráfagas de balas.

El soldado de infantería común tenía cuatro armas a su disposición en las trincheras: el fusil, la bayoneta, la escopeta y la granada.

La artillería dominaba el campo de batalla en la guerra de trincheras, del mismo modo que la fuerza aérea domina la guerra moderna.

El gas lacrimógeno lo emplearon por primera vez en agosto de 1914, pero solo servía para dejar al enemigo momentáneamente fuera de combate.

La finalidad principal de las aeronaves en la guerra de trincheras era el reconocimiento y la observación de la artillería. El papel de los cazas era proteger a las aeronaves de reconocimiento amigas y destruir las enemigas, o al menos impedirles la libertad de movimientos.

Los alemanes utilizaron lanzallamas durante la guerra, pero dado que la tecnología estaba en sus comienzos, su valor era sobre todo psicológico. Cuando se desarrolló más la guerra se usaron los aviones con misiles con aletas para que cayeran en punta.



5. LAS MUJERES EN LAS TRINCHERAS

“La mujer, como parte de la población civil y obviada en cualquier decisión, resulta ser, sobre todo, víctima y, por lo general, son ellas las que calladamente, en períodos de guerra, han garantizado la supervivencia de su familia e incluso, de su comunidad”, explican en el estudio el Instituto Henry Dunant.

Esta guerra movilizó a unos 65 millones de soldados entre todos los contendientes, provocó que la retaguardia quedara huérfana de mano de obra y hubo que recurrir a la mujer para mantener la producción.

Como ejemplo, la investigación recalca que 430.000 francesas y 800.000 británicas pasaron de ser amas de casa a obreras asalariadas e incluso, muchas de ellas forman parte de la propia guerra.
“En Alemania, sin participar directamente en las unidades de combate, contribuyeron en las actividades de la guerra, trabajando en las fábricas de armamentos y desarrollando diversas tareas cerca del frente de batalla: avituallamiento, depósito de municiones... Poco antes de terminar la guerra, casi 68.000 mujeres reemplazaron a los hombres que estaban en el frente” ,aseguran.

Según el instituto, “las mujeres demostraron que podían tener roles totalmente nuevos. Antes de esta gran guerra se hablaba de que las mujeres no podían desenvolver los mismos trabajos por diferencias físicas y psicológicas, y eso afortunadamente se rompió”.



6. RELATOS DE LOS SOLDADOS

La primera carta es del sargento Harry Roberts, Fusilero de Lancashire, os mostraré un pequeño fragmento donde hablaba sobre el dolor que se siente con “el pie de trincheras”.

“Si nunca te han descrito cómo es el pie de trinchera, lo haré yo. El pie se te hincha dos o tres veces más que su tamaño normal y se vuelve completamente inerte. Puedes clavarle una bayoneta y no sentirás nada. Si eres lo suficientemente afortunado como para no perder el pie y que la inflamación vaya remitiendo, es cuando comienza la más indescriptible de las agonías. He escuchado como los hombres lloraban y gritaban de dolor, y muchos han tenido que ver cómo les amputaban sus pies y sus piernas. Yo fui uno de los afortunados, pero un día más en las trincheras y puede que hubiese sido demasiado tarde."


El segundo fragmento es extraído de un libro. Este es narrado por Edward O. Mousley, también soldado.

“Hasta las situaciones más peligrosas se vuelven cotidianas y los días parecen pasar sin comportar nada de la constante proximidad de la muerte. Pero incluso esa idea, por muy notable que pudiera resultar en un principio, acabamos reprimiéndola, ya que es un elemento que de tan omnipresente se vuelve insulso. Tengo la firme convicción de que es posible cansarse de un sentimiento. No se puede ir por ahí con miedo a morir indefinidamente o mantener un interés por la inminencia de la muerte sustentado en los escalofríos. La psique se harta y lo aparta a un lado. Yo he visto caer abatido a un hombre que estaba a mi vera mientras yo, sin inmutarme, seguí señalizando las instrucciones para dirigir el fuego. ¿Es que soy insensible?”

Estos pequeños fragmentos os ayudarán a entender un poco más la vida en las trincheras.
Desde mi punto de vista, leer los relatos contados por los soldados nos ayuda de manera clara y fácil a saber su día a día. Nadie de nosotros sabe lo que es vivir durante cuatro años en un sitio como las trincheras, con todas las complicaciones que había y lo difícil que podía llegar a ser. Es espeluznante pararse a pensar las terribles cosas por las que han tenido que pasar.


Finalmente dejo el link de un vídeo, que es una pequeña parte de una película de la guerra de las trincheras. Donde se demuestra lo afectados psicológicamente los soldados que estaban en las trincheras.


7. FUENTES